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El gran fraude

MILAGROS AGUIRRE

 Jueves 15 de noviembre 2018

El Yasuní es objeto de varios y sostenidos fraudes y engaños. Hicieron fraude cuando dijeron que iban a buscar recursos para dejar el petróleo en el subsuelo cuando, al mismo tiempo, trabajaban sin descanso en ejecutar el llamado Plan B construyendo la infraestructura en el llamado bloque 43 o ITT. ¿Dónde iría a parar los ahorros que, en 2007, un niño depositaba en una hucha que tenía Lenín Moreno, en ese entonces, vicepresidente?

Vendieron gato por liebre. Engañaron a los supuestos financistas haciendo creer que la parte (el bloque 43 o ITT) era el todo (parque nacional Yasuní) cuando sus recursos estaban siendo explotados desde hace treinta años.

Hicieron trampa en la supuesta consulta previa a las comunidades que no fue ni libre ni informada, como debían conforme los acuerdos internacionales. Al contrario: lograron las firmas de las comunidades por medio de la presión y el chantaje.

Engañaron a la gente diciendo que construirían un sendero ecológico cuando hacían una enorme vía que dejaría una nueva cicatriz para siempre en la selva.

Hicieron trampa cuando declararon de interés nacional su explotación. Y cuando anularon, con artimañas, las firmas de la consulta que los Yasunidos habían propuesto para que el pueblo se pronuncie sobre el tema.

Ya en este gobierno, que es el mismo que el anterior, convocaron a una consulta popular y engañaron nuevamente. Se supone que ganó la ampliación de la Zona Intangible y, mañosamente, están reduciéndola, eliminando la zona de amortiguamiento. Fingieron un diálogo con la “sociedad civil” para decir que escuchaban las propuestas, pero en realidad, su sopa ya estaba cocinada. No escucharon nada. No tomaron en consideración ninguna de las propuestas de ampliación. Y lo más grave: no han tomado en cuenta la vida de quienes viven ahí y que son dueños de esos territorios.

La engañifa es gigante. No están cumpliendo con la Constitución que escribieron con letra muerta. En ella se dice que está prohibida la explotación de recursos en los territorios de los pueblos indígenas llamados en aislamiento.

Está claro: la única verdad es que los intereses petroleros dominan por sobre todas las cosas. Lo demás, la Constitución, leyes y decretos, límites para la supuesta protección han sido parte de la madeja de engaños que se ha tejido sobre el tema.

Ojalá de esos incumplimientos tome nota la relatora de pueblos indígenas de Naciones Unidas que llega la próxima semana. Responderán con más engaños: no hay rastros de su presencia, no los hemos visto, no están, es mentira, invento de curas, antropólogos y ecologistas. A la final, esta ha sido la respuesta de los últimos treinta años

Este contenido ha sido publicado originalmente por Diario EL COMERCIO en la siguiente dirección:https://www.elcomercio.com/opinion/milagrosaguirre-columnista-opinion-fraude-yasuni.html. Si está pensando en hacer uso del mismo, por favor, cite la fuente y haga un enlace hacia la nota original de donde usted ha tomado este contenido. ElComercio.com