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Declaración de Fin de Misión de la Relatora Especial de las Naciones Unidas

sobre los Derechos de los Pueblos Indígenas

al finalizar su visita a Ecuador

Victoria Tauli-Corpuz

Noviembre 2018

Pueblos indígenas en aislamiento y contacto inicial

Durante mi visita pude recibir información detallada sobre la situación de los pueblos indígenas en aislamiento y contacto inicial. Se me informó de que el Ministerio de Justicia está desarrollando una política en este sentido, y que se han adoptado algunas medidas encaminadas a su protección en aplicación de las medidas cautelares dictaminadas por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, y teniendo en cuenta las Directrices de las Naciones Unidas sobre los pueblos en aislamiento voluntario y contacto inicial de la Amazonía y el Gran Chaco.

Pese a ello, debo señalar que las recomendaciones sustantivas que tanto yo como mis predecesores hemos realizado sobre el tema no parecen haber sido adecuadamente consideradas. En mi opinión, para garantizar la protección de los pueblos indígenas en aislamiento y contacto inicial es necesario resolver las causas subyacentes que afectan a sus derechos fundamentales y que explican los conflictos que se han producido en los últimos años entre grupos aislados, comunidades waorani y terceras partes. Estas causas subyacentes están vinculadas a la falta de reconocimiento y protección de los territorios ancestrales de los pueblos indígenas en aislamiento. Como ya mencionaron anteriores titulares del mandato, la Zona Intangible Tagaeri Taromenane (ZITT) no incluye la extensión total de sus tierras ancestrales. Además no ha existido una adecuada protección frente a intrusiones ilegales, que están empujando a los pueblos indígenas en aislamiento hacia las tierras y territorios de otras nacionalidades indígenas, en especial los waorani. Aun más preocupante es el hecho de que el Estado este concediendo licencias extractivas que afectan dichas tierras ancestrales. De acuerdo a la información recibida, la extensión del Parque Nacional Yasuní ha sido considerada un desarrollo positivo, resultado de la consulta popular de 2018, pero la decisión de proceder con la explotación petrolera en el área de amortiguamiento puede producir impactos graves e impredecibles sobre los pueblos indígenas en aislamiento y en contacto inicial de la zona.

La falta de desarrollo de un plan de paz amplio junto con la nacionalidad waorani es un serio vacío para la protección de todos los grupos waorani, incluidos aquellos en aislamiento. He recibido también información sobre la situación del proceso penal contra personas waorani implicadas en la masacre de 2013. Teniendo en cuenta las alegaciones de falta de un debido proceso, la duración y falta de claridad en la causa, y la falta de un enfoque intercultural, muchos actores han recomendado la anulación del proceso. Me gustaría solicitar al Gobierno de Ecuador que resuelva de manera efectiva los mencionados problemas subyacentes que afectan a los waorani y a los grupos aislados de la zona, y que trabaje junto a la nacionalidad waorani con el objetivo de conseguir una paz duradera.